10 Apr
10Apr

Atalaya: el parador de las medialunas. Sobre la ruta nacional 2, a la altura de Chascomús, un parador histórico abierto en 1942 aún da que hablar. Un rito bien argentino afirma que es imprescindible hacer un alto en Atalaya para comer sus exquisitas medialunas en camino a las playas bonaerenses. Las condiciones de traslado de quienes transitan hacia la costa han cambiado mucho. Cuando Atalaya nació, los autos eran menos veloces, necesitaban abastecerse de combustible con mayor frecuencia y era preciso bajarse a estirar las piernas varias veces antes de llegar a destino. Una familia chascomusense capitalizó esa manera de viajar y concretó el negocio para adecuarse al movimiento turístico de la época. Ubicó su local en el kilómetro 113, mano Buenos Aires-Mar del Plata. El confort y velocidad de los autos actuales permiten realizar el mismo trayecto en menos tiempo, sin cargar nafta y sin entumecer las piernas como antes. Aún así, la costumbre de tomar un café con medialunas o comer algo al paso sigue siendo un clásico entre quienes rinden homenaje a ese espacio emblemático.

Atalaya incorporó un nuevo local sobre la

Comentarios
* No se publicará la dirección de correo electrónico en el sitio web.
ESTE SITIO FUE CONSTRUIDO USANDO